Ponte en situación: un fin de semana en Sevilla, un día agitado, de esos típicos de turistas de fin de semana, entre el Alcázar, la Catedral y la Plaza de Toros. Imagínate que además te espera una noche al ritmo de sevillanas hasta las primeras horas de la mañana… ¿Lo que toca después de todos esto? RELAJACIÓN!!
Confía en mí y cierra los ojos: imagínate un lugar donde el tiempo parece haberse detenido en las antiguas glorias del mundo árabe, imagínate bañeras de agua hirviendo entre maderas doradas, imagínate salas de vapor lleno de néctar y ambrosía en las que descansar… un sueño que, gracias a la magia de una ciudad encantada se convertirá en una realidad. En una pequeña y estrecha calle del barrio de Santa Cruz te esperan los baños árabes de Sevilla: Aire de Sevilla, en c/ Aire 15.
En el pleno respeto de la tradición, en un edificio antiguo con un patio andaluz con fuentes y flores, encontrarás un mundo subterráneo secreto, ideal para pasar una hora de relax. Una bañera con agua templada a 36°, una más caliente (40°) y una fría a 16°. Una pequeña sala con bóveda estrellada está dedicada al hidromasaje con burbujas y chorros de los más potentes que he probado, y también, el hammam: un baño de vapor único y refrescante. Para un delicioso descanso también encontrarás una habitación con té y bebidas y asientos con calefacción. No te olvides visitar la piscina de agua salada.
El recorrido dura una hora y media y los precios varían dependiendo del tratamiento que elijas. El completo con bañera de hidromasaje y aromaterapia que te permite acceder a las piscinas y al hammam cuesta 32 euros, mucho menos que en muchos spa aquí en la zona, y te aseguro que vale absolutamente la pena. Un consejo: para después del baño en la teteria del primer piso y disfruta de una dulce merienda entre aromas de té orientales y dulces con almendras y chocolate.
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